Leído en otros blogs: Un mundo para Julius, de Alfredo Bryce Echenique

Otro mes nos llega una excelente recomendación de la Biblioteca Pública de Pedregalejo. Para iniciar el otoño su director, José María Moncada nos ha remitido un comentario de una obra de Alfredo Bryce Echenique, un autor de mucha solvencia que te va a gustar. Como siempre, puedes encontrar esta obra en nuestra Biblioteca y también en la biblioteca pública más cercana a tu casa.

Debiera ser uno de los libros más conocidos de la literatura de mediados de este siglo, pero no lo es. Su autor debería de estar entre los más renombrados de, al menos, nuestro país, pero lamentablemente lo son otros mucho más debido a un mejor marketing o a falta de información básica sobre cuáles son los escritores que realmente lo son. 

Cubierta de la edición de bolsillo
Bryce Echenique nos trae con ésta, su primera gran obra, la historia de la vida de una familia de la alta burguesía limeña (y por extensión de todas las burguesías). Nos recoge de forma sutil, irónica, descarnada a veces, las contradicciones, "lindezas", necedades, de una clase social que se siente en la continua necesidad de reafirmarse sobre los otros, siempre en lucha por la ostentación, la diferencia y la singularidad que permite la opulencia. También las numerosas descripciones de la clase trabajadora, sirvientes y obreros ayudan a completar el cuadro perfecto de la metrópolis limeña. 

La mayor parte del retrato que realiza el autor lo veremos a través de los ojos del protagonista Julius, hijo de una familia importante de la alta burguesía, niñito de corta edad que con ojos nuevos va tratando de entender los complejos mecanismos de las relaciones de su clase social para con los suyos y para con las clases trabajadoras. Bueno, mesurado, capaz de encontrar la parte más real de los protagonistas, inseguro ante el protocolo social, dulce e inteligente, se nos antoja el protagonista Julius como una extensión del autor de la obra (de hecho tiene a veces los mismos comportamientos). 

El gran lirismo de la obra reside en su fluida acción, en su sutileza a la hora de transmitirnos realidades a veces demasiado crueles, en la perfección de los retratos de los protagonistas, en lo tiernamente que están mancillados por sus propios comportamientos y por el transcurrir de sus vidas teatrales y vacías. El relato nos abre ventanas para conocer, unas veces desde la sutil ironía y otras con el fino humor, la vanidad de los personajes en sus actos sociales, en el club de golf, en los cócteles que organizan en sus grandes mansiones, en sus misas de domingo, en comidas de compromiso o en cualquiera otro de los muchos escenarios en los que se desarrolla la vida diaria de la oligarquía de la ciudad. 

Tan magistral, severa y perversa descripción de los componentes de la burguesía limeña sólo podía hacerse desde el que ha vivido, padecido o disfrutado con sentido crítico en su seno. Este es el caso de Bryce Echenique. 

La familia de Julius en cuanto a los cánones burgueses, se desliza por un mundo en apariencia ideal (ingentes gastos, caprichos caros, grandes viajes de lujo, ocio y despreocupación) pero para él todo esto no significa más que la imposibilidad de conectar con las personas a las que quiere, de establecer vías íntimas de comunicación con su madre "Susan bonita", tan bella y elegante como vacía, tan perfecta en situaciones sociales de compromiso como sola ante tanta gente. Para ella Julius es su niñito querido a la cual se le escapa cómo tratarlo por lo diferente que es con respecto a "cómo tendría que ser en ese mundo". 

El libro en Jábega2
El libro no analiza con objeto de criticar. No, más bien intenta mostrar lo que percibe un observador avispado, sin emitir juicios de valor; unas veces con más ironía, otras con menos sutilezas pero con más humanidad. No fue un libro comprendido en su momento ni por parte de la burguesía descrita, que lo entendió como un ataque frontal por parte de uno de sus miembros, ni por parte de la revolución que posteriormente tomó el poder en Perú, la cual erigió esta obra, equivocadamente, como el "libro de la revolución”. 

Julius, el protagonista, nos enseñará en su aprendizaje social que el mundo que le rodea, por más que sea ideal en apariencia, no es el mundo más deseable para la armonía social, ni para establecer lazos firmes con las personas a las que más amas y necesitas.

Reseña realizada por José María Moncada. Biblioteca Pública de Pedregalejo "Bernabé Fernández Canivell"

Comentarios

  1. ¡Grande Bryce Echenique! como buen limeño es dulce, tanto que la primera vez que entró en un bar de nuestro país, se asustó creyendo que la gente se estaba peleando, le aclararon que era la forma, el tono habitual de hablar en un bar de España, al poco tiempo reconoció la ternrar de los españoles, pese a que gritaban en los bares.

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    1. ¡Y tan grande! Bryce Echenique destaca entre los mejores autores de la gran literatura hispanoamericana del último siglo (y española, por extensión lingüística). Un placer leerlo y un placer leer la anécdota que nos traes. ¡Gracias!

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