MEDIO AMBIENTE. Mañana: una revolución en marcha

Cyril Dion, creador del movimiento Colibris, que pretende fomentar la creación de nuevos modelos de sociedad basados en la autonomía, la ecología y el humanismo, lee un buen día en un blog medioambiental que en 2100 puede llegar el fin de nuestro planeta. Ante la ausencia de repercusión de la noticia, y no sin dificultad, decide poner en marcha una campaña de financiación colectiva para llevar a cabo el rodaje de un documental y la publicación de un libro en el que plasmar una búsqueda de acciones precursoras en diversos campos con objeto de afrontar el problema.

El recorrido de Dion y su equipo nos lleva, en primer lugar, a la alimentación. A la apuesta por la agricultura local bien entendida (con visitas a Detroit y Todmorden) y por la permacultura como formas para que los ciudadanos recuperen el control sobre lo que comen.

De ahí pasa a la necesidad de establecer un cambio energético, con el alejamiento de los recursos fósiles y la apuesta por conceptos como el ‘negavatio’ (no confundir con megavatio), que sería la energía que el ser humano es capaz de no consumir y, por tanto, de evitar producir. Las experiencias de Islandia, con la geotermia; la isla de Reunión, con la empresa Akuo; Copenhague, como primera capital neutra en emisiones de co2; o Malmö y sus ecobarrios, ilustran esta necesidad, a la que contribuye también un nuevo sistema de reciclaje implantado en la ciudad de San Francisco.

En cuanto a la economía, se defiende que el crecimiento mundial en este campo debe ser sostenible, y en consecuencia, no puede prolongarse indefinidamente, en contra de lo que las multinacionales propugnan. Así, profundiza en el caso de la empresa francesa de sobres Pocheco, con un organigrama plano y beneficios reinvertidos de manera sistemática en la propia compañía. Y entrevista a Bernard Lietaer, economista belga que explica cómo se crea la moneda (concluyendo que existe mucho menos dinero del que realmente reza en nuestras cuentas bancarias, por lo que la burbuja volverá una y otra vez) y que defiende la creación de divisas locales o complementarias, un sistema que ya funciona con las WIR suizas o en la ciudad británica de Bristol. Y propone otra clave: el uso compartido descentralizado de los objetos, a través de su reparación o producción propia.

También nuestro sistema democrático es susceptible de ser reinventado. Tras una entrevista con el escritor David van Reybrouck, que trata de buscar los motivos por los que se ha instaurado un palpable descrédito respecto al poder político, se describen de primera mano hitos como la revolución de los ciudadanos islandeses contra su propio gobierno tras la quiebra de Lehmann Brothers o la gobernanza de los ciudadanos por sí mismos en Kuttambakkam (India).

El ejemplo educativo de Finlandia y de la apuesta de Rob Hopkins por el fin del petróleo son las últimas etapas de este viaje por el mañana. De esta revolución en marcha traducida impecablemente por Silvia Moreno y editada de manera vistosa y atractiva por Errata Naturae, que una vez terminada, se me antoja de recomendación imprescindible. Porque las cosas pueden ser de otra forma, y a veces, si no te lo cuentan, nunca lo vas a saber.

Tienes disponible este título en la Biblioteca de Educación y Psicología.

Paco Alba. Biblioteca de Ciencias de la Educación y Psicología.