Acercándonos a los autores: Agatha Christie


Todo el mundo conoce a Agatha Christie (1890-1976), la famosísima escritora de misterio. La Reina del Crimen escribió numerosísimas historias que plasmó en novelas, relatos, obras de teatro e incluso poesías que han sido editadas con enorme éxito de ventas en numerosos países y casi en tantos idiomas como la Biblia. Sus más de 80 títulos (¡sólo de novelas!) renovaron el panorama del crimen escrito y se configuraron como esquema básico de lo que debe tener un buen crimen. Es menos conocido que publicó también, bajo el pseudónimo de Mary Westmacott, novelas de corte romántico-policíaco (como Un amor sin nombre) en una mezcla de estilos que más adelante popularizaría Mary Higgins-Clark. Una obra suya, La ratonera, basada en el relato Tres ratones ciegos, ostenta el récord de permanencia en cartel: el 6 de octubre se cumplen 60 años de representación contínua, ya que se estrenó en 1952.

Su vida no fue, precisamente, la de una apacible Miss Marple (una de sus detectives de ficción, la más conocida junto con Hércules Poirot). Con una personalidad inquieta desde muy joven (quiso ser cantante de ópera, pero no tenía la voz adecuada) y un carácter muy acusado, fue una mujer muy activa a la que le gustaba viajar y visitar no sólo los destinos típicos de la época, sino también a lugares prohibidos para las mujeres. Así, viajó, sola y en compañía de su segundo marido, Max Mallowan, a Oriente Medio e intervino en las excavaciones arqueológicas en las que él participaba tomando notas, excavando y realizando labor de arqueóloga profesional. Su amor por tan exótico destino lo plasmó en diversas novelas (Maldad bajo el Sol, Intriga en Bagdad o La venganza de Nofret, un asesinato en el Egipto faraónico, por poner un ejemplo).

Como muchos autores del género, comenzó a escribir misterios por casualidad: su hermana Madge la retó a escribir una historia de crímenes que fuera creíble. Y de ese reto nació El misterioso caso de Styles, una de sus novelas más conocidas. Se retrató a sí misma en sus novelas. Hay un personaje que aparece en las novelas de la serie de Hércules Poirot, una escritora de novelas de misterio un tanto alocada (Ariadne Oliver) que, en diversas entrevistas reveló que estaba basado en ella misma. Es por eso que sabemos que planificaba sus crímenes... ¡mientras fregaba platos! En su obra aparecen, y es un caso raro entre los escritores de la época, dos detectives distintos pero de enorme popularidad: la señorita Marple y Hércules Poirot, entre los que resulta muy difícil elegir al favorito. Otros de sus protagonistas recurrente, el matrimonio Beresford, le sirvieron para parodiar el estilo literario de otros autores de novela policíaca, como por ejemplo, el de Dorothy L. Sayers, una de sus mejores amigas y seria rival al título de Reina del Crimen. Su novela de misterio favorita fue El misterio del cuarto amarillo, de Gastón Leroux, todo un clásico, y sentía especial predilección por Dickens y su Casa desolada, de la que recibió el encargo de adaptar para el cine (un proyecto que se abandonaría debido a la enorme extensión de la novela original). La última novela que escribió fue La puerta del destino, publicada a finales de 1973. 

Las últimas palabras de Telón (la novela que relata la muerte de Poirot) “Si, hemos disfrutado de días muy buenos…” son las más idóneas para expresar la sensación que queda en el lector que termina con alguna de sus novelas.

Muchas de sus obras fueron llevadas al cine. Las más conocidas, y las que mejor adaptaron sus novelas son Asesinato en el Orient Express, Muerte en el Nilo y El espejo roto (una adaptación de El espejo se rajó de parte a parte protagonizada por Elizabeth Taylor). Y en televisión, Miss Marple se convirtió en toda una estrella del prime-time.

Otro punto crucial de su biografía, que ha hecho (y hace) correr ríos de tinta, es su desaparición. Estuvo una semana perdida, sin que se haya podido desvelar el misterio de dónde estuvo ni qué hizo en esos días. Como en todo buen misterio de Agatha Christie, hay pistas: una camarera que afirma haberla visto en un balneario, un nombre en el registro de clientes del balneario que podría haber utilizado como pseudónimo... Pero nadie ha podido aún descifrar esas pistas. La tesis más defendida (y con más visos de realidad) es la de Andrew Norman, médico y escritor, y cuenta que en un momento difícil de su vida, con un matrimonio en vías de disolución y con la muerte reciente de su madre, sufrió un accidente de circulación y quedó amnésica por un golpe en la cabeza, yendo a parar al balneario antes citado. Se filmó incluso una película (Agatha, protagonizada por Vanessa Redgrave) sobre su misteriosa desaparición. Lo cierto es que siendo una personalidad destacada en Gran Bretaña, muy conocida y buscada por policías y periodistas (incluso Sir Arthur Conan Doyle, el creador de Sherlock Holmes se interesó en el caso), nadie pudo localizarla, lo que aumentó la intriga.

Agatha Christie en Jábega
Agatha Christie en Jábega
En nuestra Biblioteca tienes muchas de sus mejores obras y una película Asesinato en el Orient Express, de Sydney Lumet y protagonizada por Albert Finney, Lauren Bacall, Martin Balsam e Ingrid Bergman (1974).

¿Nuestras novelas favoritas de Agatha Christie? Son tantas!!! Por hablarte de alguna: Diez negritos, Muerte en el Nilo, El asesinato de Rogelio Ackroyd, Los cuatro grandes, Muerte en la vicaría, Asesinato en el Orient Express, La venganza de Nofret, Cartas sobre la mesa, La casa torcida, Sangre en la piscina, Noche eternaUn triste ciprés. ¿Cuál es la tuya?



Comentarios

  1. Me parece curioso que un nombre inglés como Agatha lleve tilde...es correcto???
    Gracias

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    Respuestas
    1. No, no es correcto. Es un lapsus calami que acabo de corregir. ¡Gracias por indicárnoslo!

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