Deseos ocultos de pareja: La llave, de Junichiro Tanizaki.

¿Es posible que quede algún secreto después de treinta años de matrimonio? Si no hay ninguno, quizá sea mejor crearlos. Tener algo oculto puede ser un aliciente cuando una pareja entra en el letargo de la costumbre, cuando los hijos se van del hogar familiar y hay que volver a ser solo dos.

La pareja protagonista de esta novela se anima con diarios. Comienza el marido exponiendo por escrito secretillos que no duda en ir dejando cada vez más a la vista con la clara intención de que ella lo lea. La emoción de esconder y mostrar a la vez segrega adrenalina y despierta deseos en el marido que quizá no sean los más adecuados para confesar a una contenida esposa japonesa fiel, fiable y poco dada a excesos y fantasías. Ella, por su parte, comienza a escribir a su vez un diario en el que volcar las incertezas de su matrimonio y la preocupación por su hija y por el pretendiente de la chica, un compañero de trabajo del marido. Tampoco ella duda de la rectitud de su serio marido; está segura de que no cometerá la falta de delicadeza de leerlo... y lo esconde donde sea fácil encontrarlo.

Entre buscar la provocación y saciar deseos, la pareja va avanzando en una relación en la que el lector se incorpora como voyeur, no tanto de la sexualidad de la pareja, sino del juego de curiosidad y confianza (mucho más erótico) que se establece entre ellos y en el que participan también la hija y el joven profesor. 

Me ha sucedido, con frecuencia, que al leer autores japoneses me ha quedado la idea de que me faltaba algo, de que había un trasfondo cultural que me impedía comprender del todo la profundidad o la belleza de la obra que leía. Esto no me ha pasado con este título. Fácil de leer, el libro de Junichiro Tanizaki es apto para cualquier lector y está escrito con gran sencillez, en un estilo elegante e intimista muy acorde con la historia que narra. Un libro breve y delicioso, de una suavidad refinada acorde a la idea que tenemos de la manera de ser japonesa que, como no, tiene secretos y sorpresas. 

¿Qué tal empezar a escribir un diario? En la Biblioteca tienes el modelo (;-)

María Remedios Herrera Gutiérrez. Servicio al Usuario

Comentarios

Entradas populares